domingo, 19 de julio de 2015

Amistades del medio oriente.




Durante los meses de junio y julio parecieran pasar inadvertidas "esas" fechas relacionadas con la historia de Venezuela. Su importancia queda en un segundo, tercero o último plano para una tierra que actualmente está más inmersa en lo urgente, en esa sobrevida entre la violencia y un desabastecimiento infinito, en una pobreza que llena el alma de muchos venezolanos quienes no alcanzan a entender cómo en poco más de 16 años se ha acabado con la esperanza.

Desabastecimiento,Venezuela
Estado Táchira
La mayoría de las ocasiones uso mis letras para explicar a mi hijo la historia del país donde nació, que está conectado indefectible y entrañablemente a éste donde vive, a su casa, España. Hay fechas en las que se nos mezcla la vida, personas y hechos que deberían estar enmarcados en negritas en el hilo conductor entre ambas tierras. Con mucho más riqueza que pobreza.
Pero se sobrepone una realidad que me llega de cerca. 
Hablo con "mi gente" y el "no hay" es el común denominador de todas las conversaciones. La angustia se impone ante la imposibilidad de poder paliar la necesidad de un país normal, ese que sabemos que sí existió. 

Entre tanto se me hace increíble escuchar y leer en esta España "del siglo XXI" a la izquierda radical hablar sobre un proceso constituyente, y asegurar que Venezuela es un ejemplo de democracia, esa misma izquierda que ahora profesa no serlo tanto
La historia no perdona, y en algún momento pasará factura a tanto "buenismo". Creen que con ello borran de la faz de la tierra los cientos de presos políticos y de conciencia que tiene mi país desde hace más de 16 años, durante ese régimen Castro-Chavista que ha llevado a la miseria esa "tierra de gracia" y a otros países vecinos. 
Sobre ello ha escrito recientemente Daniel Lacalle en su blog. Lo hace no sin sorprenderse cómo un país que lo tenía todo para estar entre los mejores del mundo, se encuentra sumido en altos porcentajes de pobreza crítica y un salario mínimo ubicado entre los peores del planeta. 

"la pobreza real supera el 55%. Muy por encima del 26% oficial aunque el gobierno se niega a publicar cifras oficiales recientes. El salario mínimo interprofesional es de 29 dólares al mes. Ni un dólar al día. Descontando el impacto de la inflación, que en Venezuela supera ratios de doble dígito, el crecimiento real de Perú, Chile o Brasil en los últimos catorce años es más de tres veces superior al venezolano. Esto en un país que es de los más ricos del mundo en petróleo, que contaba con empresas líderes en sectores de todo tipo, y que ha desaprovechado la época en que disfrutó de unos precios del petróleo que se multiplicaron por diez para despilfarrar, destruir el tejido productivo y encima depender aún más del petróleo, mientras sus dirigentes populistas y los llamados boliburgueses se llevaban miles de millones de dólares."

No puedo entender cómo el mundo ha hecho mutis ante la violación diaria de los Derechos Humanos de millones de personas. Cómo se ha venerado la figura de un traidor que quiso ser "golpista y héroe", frustrado por un sistema que funcionó en su momento
Cómo olvidan en pocos meses que existen personas que han obtenido réditos del erario público venezolano. Cómo borran de su memoria inmediata la figura de un Monedero quien fue "veedor internacional" en el referédum revocatorio de 2004, el que ha sido estudiado estadísticamente por cómo hacer que los números cambien en horas a "tu favor". Cómo quieren obviar que vivió en el Palacio de Miraflores y fue "asesor" de Hugo Chávez durante más de 10 años, llevando consigo en su mochila particular a otros hoy figuras principales de Podemos, Pablo IglesiasCarolina Bescansa, Íñigo Errejón y Luis Alegre

Pero recientemente lo que más llama la atención es que se nombra "de puntillas" en los medios de comunicación la relación entre Venezuela e Irán, algo que lleva años ocurriendo en detrimento del pueblo venezolano. Una extraña relación sobre la que Moisés Naim en 2009 evalúa, señalando cómo pueblos diametralmente diferentes, opuestos en muchísimos aspectos mantenían políticamente un objetivo en común. 


Chavez y Ahmadijejad

"Pero los parecidos van más allá de la economía. Si Ahmadinejad apoya a Hezbolá, Chávez apoya a las Farc. Mientras Ahmadinejad intenta controlar Líbano, Chávez lo hace con Bolivia. Ambos sueñan con presidir una potencia regional. Ahmadinejad promete la desaparición del Estado de Israel y la caída del Gran Satán. En Venezuela, donde no se sabía qué era el antisemitismo, ahora se profanan sinagogas y Chávez se queja de que el estrado de Naciones Unidas donde le tocó hablar después de George Bush le huele a azufre satánico. El gobierno venezolano es hoy más hostil hacia Israel que los de Egipto o Libia"

Alek Boyd en su artículo "Who is Tareck El Aissami?" (2013) identifica a un personaje que ha tomado rápidamente el liderazgo de un régimen, también nombres y hechos asociados con Él. La lectura se hace aún más interesante si se van abriendo los link que gentilmente Boyd va "dejando" colgados a lo largo de ella, como la ya conocida asociación en Hugo Chávez y la FARC por lo que el llamado NarcoEstado, también mencionado en diferentes post en el blog País Bizarro
Asimismo, Boyd señala los datos que un año antes publicaba el Departamento del Tesoro de EEUU sobre Hezbollah, Colombia y Venezuela

En diciembre de 2014, en otro post de este mismo blog me referí a Tareck El Aissami, así como también esa extraña relación que ha permitido estar a Pablo Iglesias y su gente, con su programa La Tuerka en una televisora iraní, HispanTV. 

"estamos dispuestos a cabalgar contradicciones...es más efectivo lo que estamos haciendo" 

Pareciera todo bien pensado, premeditado, programado para alcanzar la península y "asaltar el cielo". Buscamos los orígenes de un pasado reciente, y encontramos al comunismo como punto de coincidencia, tanto en Madrid como en Barcelona estamos viviendo su inicios

Entre tanto las noticias a ambos lados del Atlántico siguen relacionando este mundo occidental, que conocemos, con el árabe, del que apenas sabemos, y en particular Irán. Muchos leemos estupefactos sobre "el trato" del Presidente Obama, mientras justifica "the deal" como "era ésto o la guerra", la que pareciera llevar como guinda el agradecimiento de Putin.    

"El presidente (Obama) agradeció al presidente Putin por su importante papel" en la llegada a un consenso con Teherán, que "culminaron 20 meses de intensas negociaciones", señaló la Casa Blanca en un comunicado"

Sí, a Irán se le da carta blanca para continuar con sus armas nucleares, por las que ha ido por Uranio a Venezuela, Y entonces, ¿qué pasa con toda la información que tiene el Departamento del Tesoro de EEUU sobre la relación entre Hezbollah y Venezuela?.

Como antes había mencionado, existe una mano que mece la cuna, quizás alguien ayude desde El Caribe, donde según la administración Obama se reabrirá pronto la embajada, en contra de los Republicanos del Congreso de EEUU. Creo que muchos al igual que yo nos preguntamos, ¿quien está sentado realmente desde hace casi 8 años en la Casa Blanca?, ¿A qué intereses responde?

La historia se repite indefectiblemente. ¿Qué ocurrirá en Europa?, ¿Nos quedaremos de brazos cruzados? 


Nota Final
Agradezco a Vicente Jiménez, @parnasillo, sus palabras que agrega a manera de Prólogo en su Blog "Lo que nos une", por razones obvias lo dejo para el final: 


Prologo:
Ante la aparente indiferencia de la calurosa rutina del estío: "Durante los meses de junio y julio parecieran pasar inadvertidas..." la escritora no introduce a una serie de dramáticos eventos que se están dando bajo el paraguas de esa aparente normalidad. El uso latinoamericano del lenguaje le da un delicioso toque que no puede pasar inadvertido al lector español: son giros, expresiones y formas desconocidas por estos lares y que aportan una riqueza inestimable al bello idioma español. Carolina aporta pasión y refleja el sentido de pérdida sufrido por su país; Venezuela. A la autora, que parece salida de la generación del 98 Venezuela le duele, y España le duele porque ya ha vivido los efectos de la denominada extrema izquierda y sabe por experiencia que no quiere un "grexit" para España si seguimos el desastre griego ni la dictadura Chavista si seguimos el ejemplo Venezolano. La tradición oral está epitomada en la figura de ese hijo al que le enseña y explica la historia de su país..., que no se repitan los últimos treinta años de historia en España. El lector no quedará indiferente ante la forma como tampoco ante un contenido que por poético, no deja de aportar la objetividad de los datos de toda una historiadora. Vicente Jiménez. 





jueves, 2 de julio de 2015

Mis recuerdos del CORRALITO

En septiembre de 2001 fui a un curso de 2 meses en la Argentina, apoyado y financiado por la Agencia Internacional de Cooperación Japonesa, JICA, a través de unas becas a las que teníamos que "aplicar" para unas pocas plazas en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), capital de la Provincia de Buenos Aires, a unos 60 km al sur de Buenos Aires capital. Iba con toda la curiosidad de llegar a un país que no conocía, con ese ímpetu propio del caribeño en el inicio de una lluviosa primavera austral. Conocí gente encantadora de diferentes partes de Hispanoamérica, y mis queridos argentinos quienes no pudieron ser mejores. Nos ofrecían sus conocimientos a cambio de ir "sembrándolos", fomentar investigaciones e impartir cursos similares en diferentes países, para lo que debíamos contactar con el gobierno japonés, quien al final de todo era el que otorgaba las becas.
Este excelente sistema tenía varios años en Argentina y también en Chile, con diferentes resultados. Ambos países se beneficiaban con equipos y formación de su personal, lo que a la vez "pagaban" organizando y dictando estos cursos de "formación" a los profesionales de la Medicina Veterinaria en diferentes áreas de su especialidad.

Tenía la referencia de una Argentina de la época de la dictadura, cuando llegaron desde ese país al mío para hacerlo propio. Entre los 70's y los 80's. Una referencia similar a la de Chile, repito, con diferentes resultados.
Me encontré con un personal con una formación increíble, pero lo más importante, con una calidad humana incomparable. A su vez conocí ese hermoso país a través de sus ojos y del de toda esas personas con las que iba interactuando. Quienes luchaban en plena crisis, cuando se había establecido una falsa paridad dólar:peso. A los extranjeros se nos permitía cambiar hasta $400 por semana, y se recibía siempre una cantidad inferior a la debida.
Me sorprendió un país lleno de edificios hermosos, muchos impresionantes, los públicos no tenían dinero para mantenerlos. En particular, en la UNLP sus edificaciones presentaban filtraciones, pintura, falta de mantenimiento por un presupuesto incompleto, que apenas alcanzaba para una nómina que iba en detrimento, no había inflación sino deflación, los profesores universitarios veían como mes tras mes su sueldo disminuía de igual forma que el de la mayoría de los "empleados públicos. Allí se encontraban esos equipos financiados por el JICA y lo más importante, ese potencial humano, extraordinariamente formado aplicando a medias o en un pequeño porcentaje todo el conocimiento y las ganas de generarlo.
Comparaba la situación con mi universidad, la Universidad Central de Venezuela (UCV), donde habíamos empezado a tener importantes faltas en el presupuesto universitario, pero al ser "patrimonio de la UNESCO" parecía que sería intocable en el tiempo, una creencia que se ha caído como trozos, tal y como se ha destruido cada parte de Venezuela. Habíamos empezado a sentir el yugo de una dictadura militar que apenas asomaba el rostro.

Entonces, en esa Argentina que había conocido pasó lo impensable, el CORRALITO.
La crisis era terrible, tenía dos días de haber vuelto a Venezuela cuando llegaron las noticias de una Argentina envuelta en uno de sus momentos más terribles de su época democrática. Su gente, una gruesa clase media, con un alto porcentaje que tenía una alta cualificación y formación universitaria, esos ciudadanos, los de a pie era la más afectada.
Se desconoce cuántos suicidios ocurrieron, cuánta gente fue a la bancarrota, cuántos enfermaron para morir de tristeza y de mengua. Cuántos huyeron buscando un futuro mejor con una maleta con tres mudas, mucho miedo, dudas y a su vez expectativa, maletas cargadas de esperanza, para recomenzar lejos de su querida patria, de su casa, de los suyos. De nuevo Argentina se enfrentaba a un exilio vivido tan sólo 20-30 años atrás.

Contrapuesto a toda esa política vivida al este de la zona más austral de Los Andes, empezaba a repuntar un Chile hacia lo que es actualmente. Un país pujante, con gente en extremo trabajadora, que conoce de muy cerca las necesidades más grandes, las injusticias más terribles. El precio de su democracia actual es enorme y está teñido de sangre. Eso lo saben. Y quienes creen (realmente) en los derechos sociales luchan día a día por una educación y salud pública de calidad, sí, pero al oeste de esa misma cordillera, donde todo ocurre distinto. El JICA sigue "invirtiendo" en Chile, en sus universidades y en la investigación que allí se genera, no así en Argentina. Dos planteamientos partiendo de realidades similares para llegar a un día de hoy absolutamente contrapuesto.
¿Políticas económicas?, quizás. ¿Madurez de un pueblo?, tal vez.
Algo que es tan digno de estudio como toda la situación de Latino América


Hoy la palabra CORRALITO se repite en la vieja Europa, donde nos creemos intocables por una UE que en teoría nos "ampara". Vivimos un CORRALITO al que sentimos muy cerca, el aliento del ogro nos llega junto a la fetidez de la corrupción que ha minado instituciones mientras de nuevo, los ciudadanos de a pie son otra vez los más afectados.
Grecia ha tenido gobiernos quienes han planteado políticas que no les han favorecido para fomentar la inversión, el empleo, el crecimiento económico, la producción, la productividad. Cansados de esperar por cambios ese pueblo optó por creer en encantadores de serpientes, han depositado en ellos sus esperanzas, algo mucho más fuerte que el optimismo porque implica una fe basada en el tiempo. Quienes han llegado, sabiendo los grandes y graves fallos de los gobiernos anteriores, exigiendo a sus socios europeos más y mejor financiación. Reclaman les concedan todos sus requerimientos a cambio de esa misma fe que han depositado en ellos sus votantes griegos. Demandan a todos los millones de europeos que la UE representa lo que desean para ese porcentaje de Europa, creer erróneamente, que el populismo les llevará a mejores fines.

Me planteo preguntas que tal vez otros también se hagan, ¿cómo pedir, por ejemplo, a los portugueses que tanto han sacrificado más y mejor financiación para un país que no ha hecho lo mismo que ellos?, ¿cómo pedir a los españoles que olviden el dinero supuestamente "invertido" según las palabras de ZP, con relación a los millones entregados a Grecia?, ¿cómo pedir a los socios europeos que crean en políticas populistas que a todas luces no buscan la creación de empleo y mejorar la productividad?

La palabra CORRALITO se repite y con ella la tragedia de millones de personas. Pero también el riesgo de una Europa que necesita sus bases inamovibles, enfrentarse con firmeza a sus fantasmas y a un populismo que crece peligrosamente, sabiendo que es la ruta segura a la miseria.
Mientras esa misma Europa conoce que Rusia avanza, y que estos días está a la espera, "de guardia".